Si una persona resulta impactada por un chorro de agua a presión ésta siempre deberá acudir, de forma inmediata, a un hospital o centro médico, donde le puedan evaluar y tratar los daños correctamente.
En algunos casos la herida producida será grave y resultará muy evidente la necesidad de atención médica, pero en otros puede parecer pequeña e insignificante.
A pesar de ello, nunca hay que confiarse, siempre es imprescindible que dicha herida sea examinada por personal sanitario de forma inmediata, pues el chorro de agua puede haber dañado la piel u otros tejidos internos e incluso haber perforado la carne u órganos a través de un orificio pequeño.
Será muy conveniente y absolutamente recomendable que, al llevar al herido al hospital, éste lleve consigo algún documento que incluya información para los equipos médicos sobre cómo proceder al tratar heridos con agua a presión.
A este respecto, al final de la Guía sobre limpieza industrial, en el capítulo 11, encontrarán una ficha tipo para accidentes con agua a presión destinada a ayudar a los equipos médicos que atienden este tipo de lesiones.
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